Respecto de la Pretensión de Instalación existen un par de procedimientos que dan un valor medible pero de difícil realización:
1- La pretensión de instalación debe ser 1,5 a 2 veces la Tensión de Servicio o de Trabajo calculada del sistema, se somete la correa a ese esfuerzo durante 24 hs. Este procedimiento, que no tiene en cuenta el tipo y modelo de correa, implica disponer de un dispositivo que permita lograr esos valores y con el riesgo sobre la estructura del elevador que esos valores representan. A modo de ejemplo, para un elevador de ancho de correa 300 mm con una Tensión de trabajo calculada para el sistema de unos 45 kg/cm (80 t/h y 30 mts. de altura) se requeriría someter a la correa a una Tensión equivalente de entre 2.000 kg. a 2.700 kg aproximadamente.
2- La correa debe tensarse hasta que estire un 0,5%. Este procedimiento implica marcar 2 puntos en el largo de la correa cuya distancia esté precisamente medida. Luego someter la correa a un tensado hasta que la distancia entre esos dos puntos haya crecido un 0,5%. El esfuerzo necesario para lograr este valor va a depender del tipo y modelo de correa de que se trate. Siguiendo con el ejemplo anterior, deberíamos seleccionar una correa cuya Tensión de Servicio fuese un poco superior a la calculada. Optaríamos por una de 54 kg/cm. Si consideramos un estiramiento máximo de un 2% para esos 54 kg/cm, según indica el fabricante y considerando también que la curva de estiramiento en este sector por debajo de la Tensión de Servicio es lineal, podríamos calcular que la fuerza (peso) a aplicar sobre la correa sería de 405 kg (por cálculo) para lograr ese 0,5% de estiramiento.
Existe otra regla, a este respecto, pero sin valor medible, solamente indica una acción y una duración y es la siguiente:
– La correa debe permanecer colgada del tambor de mando con los cangilones instalados durante 24 horas antes de la realización de la unión definitiva.